La importancia del farol en el poker: aprende a engañar a tus rivales

La mayoría de las personas piensan que el farol o bluff es una parte vital del juego de póker, pero sólo los verdaderos jugadores saben que no es tan común ni tan utilizado como muchos creen. Sin embargo, hay momentos donde la capacidad de engañar a tus rivales puede ser muy efectiva, aprende con nosotros la importancia del farol en el poker.

Es cierto que en algunos casos, fanfarronear agrega sabor al juego y un poco más de diversión, muchos dicen que el poker sin farol sería realmente aburrido y un juego completamente diferente, pues en algunas ocasiones permite ganar una cantidad decente. Todos los que quieren ser buenos jugadores deben hacerse expertos en el fino arte de los faroles.

Un jugador fanfarronea cuando es poco probable que gane una mano en particular o cuando quiere obligar a otras personas a dejar la mano. Alguien hábil calcula la rentabilidad de un farol sopesando las probabilidades de ganar, asumiendo el riesgo del tamaño de la apuesta que tiene que realizar en el bote. Tus posibilidades mejoran si puedes predecir con precisión si los oponentes se rendirán o no, creyendo su farol.

Importancia del farol o bluff en el póker

Como mencionamos con anterioridad, el farol es la capacidad que tiene un jugador para hacer creer al resto de los oponentes lo que él desea y aunque puede ser una técnica útil, no se emplea con tanta frecuencia. Algunos puntos importantes que debes tener en cuenta antes de hacer un farol son:

• Número y tipo de personas contra las que juegas.
• Tu imagen en esa mesa en particular.
• Capacidad para predecir el comportamiento de tus adversarios, el tablero y tu posición actual.

Son aspectos básicos que todo jugador que intente farolear debe conocer para que su técnica sea efectiva, no basta con mover una pila de fichas, el farolear en el poker es un arte. En vista de su importancia vamos a extendernos con más detalle en cada uno de ellos:

Oponentes

Si tus oponentes son débiles y pagan cualquier cosa a ciegas, evita los faroles, tu rival debe tener el sentido común de retirarse. Por otro lado, si estás jugando contra más de tres jugadores, es menos probable que el farol funcione, así que queda a tu decisión si deseas correr un riesgo que es innecesario.

Imagen en la tabla

Tu imagen en la mesa también es relevante, para resumir si has estado faroleando sin éxito y el resto de los jugadores han visto tus faroles anteriores, entonces es muy probable y casi seguro que se pague muy caro cualquier nuevo intento de farolear. 

Si tienes una imagen más recatada en la mesa y tus oponentes no te han visto intentar hacer un farol, obtendrás mucho más respeto por tus apuestas y podrás hacer gala una que otra vez de algunos faroles frente a tus oponentes, teniendo una mejor oportunidad de salirte con la tuya.

Otros factores

Si eres un jugador hábil y experimentado, sabrás cuándo y cómo farolear, algo que no es fácil de aprender. Intenta farolear cuando no haya muchos empates o posibilidades de que tus oponentes mejoren su mano. Esas mesas descoordinadas, donde hay una carta del miedo que usted puede representar, ofrecen una buena probabilidad de lograr un farol exitoso.

Ten cuidado con los botes grandes, aunque ganes más con ellos, es muy probable que tus compañeros jugadores paguen el farol en estos casos, debes juzgar muy bien la situación. Por otro lado, un jugador en la última posición tendrá más información sobre las manos de sus rivales, ya que están actuando después de todos los demás y por lo tanto, podrá juzgar mejor si la situación ofrece una oportunidad para farolear.

Hay otras técnicas que puedes usar mientras haces un farol, por ejemplo, puedes usar un bluff a mitad de camino o el conocido como semi-bluff cuando tu mano todavía tiene posibilidades o el outs para ganar la mano. Esta también es una buena manera de mezclar tu juego, ya que confundirá a los demás sobre tu comportamiento.

Nunca trates de engañar a un fanfarrón y tampoco a mucha gente a la vez, porque suele ser bastante difícil engañar o confundir a toda la gente todo el tiempo. Te recomendamos que prestes atención y aprendas cómo juegan otros y uses eso a tu favor. Piensa cuidadosamente en todos estos puntos antes de tomar una decisión sobre el farol y te encontrarás eligiendo mejores lugares y disfrutando de más éxito con los mismos.

¿Es una buena opción farolear?

Aunque muchos piensan que el bluff es la vida en el poker, no todos los jugadores sienten lo mismo al respecto, pues un gran número de profesionales del poker piensan de forma muy conservadora sobre los faroles, desde su punto de vista, los oponentes que fanfarronean están tomando riesgos innecesarios.

Muchos afirman que, sin el farol, debes tener una mano fuerte para ganar el bote, quizás la más fuerte, de hecho. Pero no es fácil hacer una mano en No Limit Hold’em, la mayoría fallan en el flop y una mano muy fuerte antes del flop puede volverse muy débil en el river. En consecuencia, afirman que el farol es una parte necesaria del juego.

Por otro lado, algunos jugadores afirman que, si nunca faroleas, el poker no solo será aburrido, asumiendo que tus oponentes estén prestando atención. Se apresuraron a explotar un estilo de juego que depende demasiado de hacer manos fuertes, es decir, una que no está bien redondeada con los faroles cuando sea apropiado.

La captura de Bluff

La idea de que el bluff es una parte esencial del juego realmente es inamovible para cientos que desean divertirse en la mesa de poker, sin negar que a la mayoría les encanta hacer un buen bluff y ganar un bote. Pero estar del otro lado de esa moneda, sin embargo, no es tan entretenido.

El término «atrapar faroles» se utiliza para describir situaciones en las que pagas con una mano que prácticamente no tiene posibilidades de vencer a ninguna de las manos valiosas de tu oponente. Movimiento que jamás tendrá sentido alguno contra adversarios que no farolean.

Para esto es de suma importancia prestar atención y analizar con qué frecuencia realiza apuestas fuertes y bluff, es decir determina y comprende su manera de proceder para que puedas tener posibilidad de aprovecharte de eso.